lunes, 16 de noviembre de 2009

¿Qué son las terapias alternativas?



Se llama terapia "alternativa" o "complementaria" a los tratamientos que no "encajan" en la práctica estándar de medicina occidental. Estas pueden ser:
Prácticas de curación tradicionales como la Ayurveda, acupuntura china y prácticas de los nativos indígenas americanos
Terapias físicas como la quiropráctica, masajes y yoga
Homeopatía
Hierbas o Flores
Trabajos de energía como la terapia de polaridad o Reiki
Técnicas de relajación como meditación y visualización
Muchos doctores no están de acuerdo con las terapias alternativas. Creen que no se han hecho suficientes estudios sobre ellas y piensan que los pacientes responden mejor a las medicinas occidentales.
Otros prefieren combinar terapias alternativas junto con la medicina occidental. Creen que los tratamientos alternativos reducen el estrés, alivian efectos secundarios de antivirales o brindan otros beneficios.

¿Qué riesgos tienen?


Las terapias alternativas pueden producir efectos secundarios. Las expresiones "natural" o "no es un medicamento" no garantizan que estén libres de riesgos. La Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) no aprueba suplementos ni vigila su contenido o seguridad.

¿Por qué no se hacen más estudios sobre terapias alternativas?


La mayoría de los estudios son para una enfermedad o condición específica y son posibles cuando cada paciente obtiene exactamente el mismo tratamiento, lo cual puede no ser así en las terapias alternativas.
Algunos tratamientos alternativos tratan a la persona en su totalidad, no a una enfermedad. Pueden restaurar la armonía, el balance o el flujo normal de energía. Los acupunturitas por ejemplo, utilizan el pulso para determinar si la energía de su cuerpo está balanceada. La acupuntura se basa en la energía individual de cada persona y no en su VIH, por ejemplo y puede resultar benéfico a pesar de que no están diseñados para combatir la enfermedad específica.
Tratamiento estándar: muy pocos tratamientos alternativos están estandarizados. Las diferentes marcas de hierbas pueden tener distintas cantidades de los ingredientes activos. La acupuntura, quiropráctica y otras terapias no son estándar, se ajustan a cada paciente. Hacer investigaciones es muy difícil cuando los tratamientos no están estandarizados.
Tratamientos libres de riesgos: la FDA debe confirmar que un medicamento es seguro antes de averiguar si funciona. Incluso si un medicamento ha sido estudiado por años sin que se hayan descubierto problemas, la FDA requiere estudios científicos para demostrar que no hay peligro en usarlos.



Costos del estudio: los estudios científicos son muy caros. Los fabricantes de tratamientos alternativos no pueden solventar estudios científicos. El gobierno prefiere cubrir los costos de estudios de medicamentos occidentales porque aparentan ser más efectivos. Las patentes permiten que los fabricantes obtengan grandes ganancias. Por otro lado, la mayoría de los tratamientos alternativos no pueden ser patentados.
A pesar de todo, algunas terapias alternativas han sido cuidadosamente estudiadas. Generalmente, este tipo de investigaciones se ha hecho fuera de los Estados Unidos y quizás la FDA no los considere confiables. Las hojas informativas sobre cada tratamiento alternativo mencionan si se han hecho estudios sobre los mismos.

LAS ESENCIAS CURATIVAS DE LOS ARBOLES


Se trata de una especie muy longeva, que puede llegar hasta los trescientos años de vida. Natural de las zonas templadas del hemisferio norte, es posible encontrarlo en viveros. Suele ubicarse en las márgenes de los ríos y es muy resistente a la contaminación. La corteza y sus yemas foliares contienen un aceite esencial que cubre un amplio espectro terapéutico. Tiene propiedades sudoríficas, febrífugas, diuréticas, anti inflamatorias, balsámicas, expectorantes y
antirreumáticas.

El líquido obtenido mediante decocción alivia el reuma, la artritis y los dolores en general. Además, desinflama las mucosas y favorece la eliminación. Del álamo como una Las esencias de los árboles actúan en los niveles más profundos de nuestro ser, ayudando a sanar el alma con uno de las hierbas medicinales se obtiene un carbón medicinal que se emplea como antídoto en las intoxicaciones, como anti diarreico e incluso como dentífrico. La esencia de la flor es sedante y tranquilizante. El álamo es indicado para casos de amigdalitis, hiper e hipotiroidismo, resfríos, pulmonías, afecciones intestinales, gripes, hiperactividad, neurosis, asma, flema, sordera, pérdida de memoria y dispersión.
Una esencia o elixir floral es un preparado líquido que recoge la información o la energía que emana una flor. La esencia tiene una base acuosa que suele conservarse mezclada con coñac u otro alcohol biológico. No deben confundirse los elixires florales con las esencias aromáticas, también llamadas aceites esenciales. El elixir es energético, inodoro y posee propiedades terapéuticas. La esencia, en cambio, conserva el olor característico de una planta pero no siempre se emplea para sanar.

¿PARA QUÉ SIRVEN LAS ESENCIAS DE ÁRBOLES AIM?


Los elixires ayudan a cambiar la frecuencia vibratoria de las personas. Su ingestión nos ayuda a lograr la relajación, nos incita a estar alegres, estimula nuestra comprensión y en definitiva nos estimula a emprender un cambio de actitud ante cualquier situación que estemos viviendo. También nos ayuda a reconocer y a expresar de forma armoniosa nuestras emociones. Las esencias nos ayudan a reencontrarnos con nosotros mismos y a recuperar el sentido de la realidad. Gracias a ellas podemos establecer el contacto con nuestras sensaciones más íntimas y adquirir conciencia de cuál es nuestra tarea en el mundo. La mayoría de las enfermedades físicas tienen causas emocionales, mentales y espirituales. Las esencias de los árboles actúan en los niveles más profundos de nuestro ser. Nos ayudan a sanar nuestra alma. Sin embargo, las esencias no deben considerarse sustancias farmacológicas. Su actividad no es tan sólo física. Para recuperar la salud, exigen al paciente un cambio de actitud y una armonización emocional. Las esencias facilitan y estimulan nuestros propios mecanismos de auto curación, nos ayudan a situarnos y nos llevan a comprender nuestros trastornos. Sólo si adquirimos conciencia de nuestro malestar podremos disfrutar de una vida más plena y feliz.

¿QUIÉN PUEDE TOMAR ESENCIAS DE ÁRBOLES?


Desde nuestro sistema nervioso, la energía del árbol accede a nuestro sistema energético (compuesto por meridianos, nadis, chakras y otros canales) y desde allí llegan a nuestros niveles psíquicos, emocionales y mentales. La frecuencia vibratoria de la esencia floral nos permite tomar conciencia de las emociones malsanas y las creencias negativas que nos desequilibran y nos muestran el camino que nuestra alma necesita seguir para evolucionar. Gracias a ellas desarrollamos una percepción intuitiva mejor, nuestra actitud mental hacia la realidad cambia y nuestras emociones se armonizan. De este modo, permiten que el cuerpo desarrolle las condiciones psíquicas necesarias para desarrollar toda su capacidad autosanadora. Según el gran pionero en las esencias florales, el doctor Edward Bach, la enfermedad no es un castigo sino más bien un aviso.

¿CÓMO ACTÚAN LAS ESENCIAS DE FLORES Y ÁRBOLES?


Desde nuestro sistema nervioso, la energía del árbol accede a nuestro sistema energético (compuesto por meridianos, nadis, chakras y otros canales) y desde allí llegan a nuestros niveles psíquicos, emocionales y mentales. La frecuencia vibratoria de la esencia floral nos permite tomar conciencia de las emociones malsanas y las creencias negativas que nos desequilibran y nos muestran el camino que nuestra alma necesita seguir para evolucionar. Gracias a ellas desarrollamos una percepción intuitiva mejor, nuestra actitud mental hacia la realidad cambia y nuestras emociones se armonizan. De este modo, permiten que el cuerpo desarrolle las condiciones psíquicas necesarias para desarrollar toda su capacidad autosanadora. Según el gran pionero en las esencias florales, el doctor Edward Bach, la enfermedad no es un castigo sino más bien un aviso. Su finalidad es correctiva ya que nos ayuda a retomar el camino de la naturaleza y el equilibrio que nunca debimos dejar. Las flores en palabras suyas, amplifican nuestra frecuencia vibratoria y nos hacen más receptivos a todo cuanto nos rodea.